El Anticristo
Finalmente es bueno aclarar, que cuando Cristo baje, estará reinando el Anticristo, quien gozará de poder, buenos carros, relojes de oro, joyas, diamantes y prosperidad y que dirá que es Jesucristo y por consiguiente Dios y hará milagros y pedirá que lo adoren. El verdadero Jesús bajará en el Oriente Medio, igual como se fue y será humilde y dirá que tan sólo es un Enviado de Dios, su Siervo y Mensajero. Si se enseña que Dios ama el oro, el dinero y la prosperidad, ¿A quién seguiréis? Si la fortuna es exhibida y usada por los dirigentes, ¿A quién os pareceréis? Al Cristo del pollino ¿o al “Cristo” de reloj de oro y bienes en abundancia? ¿Al que dice que es Dios y ostentará riquezas? ¿O al humilde, que vendrá como se fue? ¿Al ostentoso que dirá que es Dios y pedirá que se le adore? ¿O al humilde? que dirá a Allah que “no se haga mi voluntad sino la tuya” y que no pedirá que se le adore, sino que se adore al Altísimo, con la misma Oración, que Él nos enseñó antes. “Dios nuestro que estás en los cielos Santificado sea tu nombre Venga a nosotros tu reino hágase Señor tu voluntad así en la Tierra como en los Cielos. El pan nuestro de cada día dánoslo hoy y perdona nuestras ofensas Como nosotros perdonamos a los que nos ofenden y no nos dejes caer en tentación más líbranos de todo mal. Amén. Los musulmanes seguirán al humilde. Al enviado de Dios. Al Mesías, Jesús, el hijo de María, la paz de Dios sea con Él y con su Madre. El perdón de Dios – (drop down) Un error muy común es sostener que Dios no puede perdonar directamente a Sus criaturas. Al exagerar la carga y castigo del pecado y sostener que Dios no puede perdonar directamente a los humanos, la gente está menospreciando la Omnipotencia y Misericordia de Dios. Cuando se convencen de que no pueden acercarse directamente a Dios, se vuelcan a falsos dioses o ayudas, como héroes, líderes políticos, salvadores, santos y ángeles o le delegan a su líder religioso que interceda por ellos, el cual siempre les garantiza su éxito, si pagan previamente el diezmo y luego, una ofrenda generosa. A menudo vemos gente que adora, le reza o busca intercesión ante falsas deidades, a las cuales consideran un ‘dios’. Dicen creer en un Solo Dios Supremo, pero a la vez oran y adoran ante otros, sólo para acercarse más a Dios. En el Islam, hay una clara distinción entre el Creador y sus criaturas. No hay ambigüedades ni misterios en lo que respecta a la Divinidad: Nada que sea creado merece ser adorado, sólo Allah, el Creador, es digno de ser adorado. Algunas religiones creen falsamente que Dios es parte de Su creación, y eso ha llevado a que la gente crea que pueden adorar cualquier cosa creada para poder llegar al Creador. A las criaturas especiales, se les puede venerar; pero la adoración sólo puede ser para Allah (Alá). Los musulmanes creen que Dios es Único y Exaltado, más allá de cualquier comprensión especulativa; definitivamente no tiene socios, compañeros, pares, antagonistas ni vástagos. Según la creencia musulmana, Allah “no ha engendrado ni fue engendrado” – ni literal, alegórica, metafórica, física o metafísicamente. Él es Absolutamente Único y Eterno. Tiene control de todo y es perfectamente capaz de otorgar Su infinita Piedad y Su infinito Perdón a quien Él quiera. Es por eso que Allah también es llamado Todopoderoso, Todo Misericordioso y Todo Compasivo. Allah ha creado la Tierra para el hombre, y como tal, quiere lo mejor para todos los seres humanos. Los musulmanes ven además a todo el Universo como una señal de la Creación y Benevolencia de Dios Todopoderoso. Además, la creencia en la Unicidad de Allah no es meramente un concepto metafísico. Es una creencia dinámica que afecta la visión que tenemos de la Humanidad, la Sociedad y todos los aspectos de la vida práctica. Un corolario lógico a la creencia islámica en la Unicidad de Allah, es su creencia en la igualdad de los hombres.